"Sólo por la manera de vestir te dejan afuera de los boliches"

En el Foro de la Juventud,
más de 80 jóvenes debaten sobre la discriminación.


Nadie se salva. Las actitudes discriminatorias se cuelan por todos los estratos de la sociedad. "Vas a un boliche más o menos bueno y te miran de arriba a abajo y te dicen: 'no podés entrar; el local está lleno'. O hacen pasar a todos tus amigos y a vos te piden documentos. O te miran los pies y si no tenés unas buenas zapatillas te dicen: 'aquí sólo se entra con zapatos'", cuentan Héctor, Lourdes y Johana, de entre 16 y 17 años, todos alumnos de la escuela Congreso de Tucumán. "Nosotras no tenemos inconvenientes para entrar en los boliches. En nuestro caso la discriminación pasa por la religión. Nos dicen que por ser católicas somos cerradas o que vivimos en una burbuja", se quejan Sofía, Sol y Guadalupe, del colegio Angel María Boisdrón.
El Salón Blanco de la Casa de Gobierno estaba repleto de jóvenes, de integrantes de ONG y de funcionarios, que habían asistido al lanzamiento del Foro de las Juventudes. Para la inauguración vino especialmente el presidente del Inadi a nivel nacional, Claudio Morgado. El foro busca generar un espacio de reflexión y de debate para la erradicación de las distintas prácticas discriminatorias. Participan alrededor de 80 foristas de entre 16 y 30 años de toda la provincia. En el acto estuvieron también el gobernador, José Alperovich; la senadora Beatriz Rojkés de Alperovich; la ministra de Educación, Silvia de Temkin; el intendente, Domingo Amaya, y el rector de la UNT, Juan Cerisola.
"Si vas a un boliche, sólo por la manera de vestir te dejan en la puerta. Si no tenés un tapado o unas buenas botas no podés entrar. Te dicen cualquier cosa para que te vayás", se lamentan Carla y Antonella, de la escuela secundaria Belgrano.
"En realidad somos los varones los más discriminados. Las chicas siempre pasan, pero nosotros nos quedamos afuera", agregan Simón, Emiliano y Facundo, de la Escuela de Educación Artística.
Un poco más grandes que los adolescentes del secundario, Julio Martínez, de 23 años, Daniela Toledo, de 24, y Emanuel Valdez, de 19, dicen que la discriminación también se sufre a la hora de buscar trabajo. "Primero, te piden experiencia, cuando saben que sos joven y no la tenés. Y después te exigen buena presencia para un trabajo que no es para atención al público; ni siquiera tienen en cuenta tus capacidades", afirma Emanuel.
En el foro, los jóvenes, considerados sujetos de derecho, podrán discutir y debatir sobre los temas que les preocupan a fin de que sean promotores de cambio de las políticas sociales.
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